6 de abril de 2010

La Femme Fatale

Existe una canción de Sabina que dice: “Hay mujeres veneno, mujeres imán, hay mujeres consuelo, mujeres puñal, hay mujeres de fuego, hay mujeres de hielo, mujeres fatal”, yo que soy fiel seguidora de las letras del Maestro, me di cuenta que esta canción busca describir a las llamadas “Mujeres Fatales”, que para algunas personas representan a seres sin escrúpulos, extremadamente seductoras y letales para aquellos hombres que se enamoran -o dicen enamorarse- de ellas y por las cuales llegan a perder la cabeza abandonando absolutamente todo, o al menos hasta que otra mujer -más- fatal se les atraviese en el camino.
Sin embargo, no todas las mujeres con esas características entran en esa categoría, ya que hay “Femme Fatale” que se definen por ser sexys, dulces amantes, bellas señoras, fieles amigas y grandiosas esposas, es decir: toda una dama.
Este mito de la “Femme Fatale”, existe desde que el hombre es hombre. Tal es su existencia desde tiempos inmemorables que existe una versión en la que Adán fue seducido por una mujer llamada Lilith obviamente después de ser expulsado del paraíso, si no cual sería el objetivo de seguir con la idea de la tentación. Aceptémoslo --me incluyo- siempre habremos algunas que causemos lujuria, gula, ira, envidia y los demás pecados capitales… aunque también le agregaría; amor desmedido y Miedo. Si! Miedo, ya que a muchos hombres una mujer con identidad propia, genuina, sin prejuicios y completamente independiente en opinión -aunque suene a canción de la Da’lessio- les provoca un pánico terrible al pensar que pueden ser superiores al mismo ego masculino.
Eres independiente, inteligente, con demasiada actitud ante la vida y muy sensual, o por el contrario, te gusta cocinar? – a mí me gusta cocinar ja!-
Me causa mucho alboroto que en pleno siglo XXI sigan etiquetando y enumerando las diferencias entre una mujer "tipo" la maestra Ximena y una "mujer fatal". O estás conmigo o estás contra mí, o eres frígida o eres fácil, blanco o negro, derecha o izquierda. Qué estrés!

Por un lado tenemos a la maestra Ximena: sensible, romántica y algo "pastelona" que aún cree en las bodas de blanco, San Valentín, el amor que dura más de 3 meses, las noches estrelladas –en las que todo hombre ha regalado la misma estrella- y un amanecer en la playa.
En el otro extremo la femme fatale: sexy, atrevida que desborda calentura –según quién?, señoras miembros honorarios de la liga de la decencia, o un termómetro-, una mujer que sabe lo que quiere, pero que se le juzga muchas veces hasta por ella misma y de la que se hace lo que se quiere, porque muchas de las veces es sólo femme y lo de fatale es solo una máscara fatal.
En qué cabeza cabe que si no tienes miedo al hablar y caminas con tanta seguridad seguramente tienes un plan malévolo para acabar con medio padrón electoral –masculino- de tu comunidad, o peor porque somos blanco de las críticas por ser principales sospechosas en el crimen que muchos hombres cometen al tener problemas con sus mujeres “color pastel”.? En fin… si aún no se sabe si el asesinato de Kennedy fue un complot, no creo que pronto sepamos porque las mujeres fatales, somos fatales y peores que el hambre en Etiopía.
Deseadas por TODOS, amadas por ninguno… Nosotras, -Ustedes y Ellas- toda hembra con poder de raciocinio –o que lo intente tener, porque luego hay unas…- cuenta con su Femme fatale dentro, y en alguna ocasión saldrá a la luz se divertirá y verá que es lo mismo, es ser mujer solo que con menos pájaros en la cabeza.
El reto, es dejar de creer que vivimos en un mundo de machos, en el cuál todavía hay muchos, y aceptar que tenemos corazón, que amamos y que también nos gusta cocinar mientras nos probamos unos tacones altos bailamos “nothing else Matters” y usamos un delantal de encaje con el manicure y el labial en rojo.
Yo soy una mujer fatal… con mucho sentimiento y de buen corazón y tu??